De sabios es rectificar. Y el señor pontífice lo ha hecho. Y reconoce que con los condones se puede detener la expansión del V.I.H. Al mismo tiempo se da cuenta que una educación sexual que evite la utilización del preservativo es simplista e irresponsable. Así el máximo responsable de la iglesia católica, demuestra una vez más que no vive de espaldas a la sociedad, a la ciencia y a la razón. Y se moderniza.
Bien ahora alguien le tiene que dar un curso CCC para el uso y disfrute de tal ingenio del ángel maligno.
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