viernes, 22 de febrero de 2008

Yo también te sigo


Pues siguiendo las instrucciones de mi amigo David Yo también me puse a mirar fijamente la luz que emanaba de mi estufa (en concreto es una estufa halójena) y tras un rato con mi mirada fija en su luz, lo que es no tener nada que hacer, he podido ver todas las respuestas.
Desde hoy soy pastafari,
Mis razones para convertirme al pastafarismo:
* Los pastafaris tienen una moral laxa, como los espagueti que adoran.
* Todos los viernes son fiesta.
* En el cielo, encontrarás un volcán de cerveza y una fábrica de stripers.
Es una religión que me ha llenado, así para terminar oremos por EL.
Oh Tallarines que están en los cielos gourmets
Santificada sea tu harina
Venga a nosotros tus nutrientes
Hágase su voluntad en la Tierra como en los platos
Danos hoy nuestras albóndigas de cada día
y perdona nuestras gulas así como nosotros perdonamos a los que no te comen.
No nos dejes caer en la tentación (de no alimentarnos de vos)
y líbranos del hambre...
RAmén.
Hay que matizar que las albóndigas son de soja, que aunque me halla convertido al pastafarismo sigo siendo vegetariano.
Pd: No me quiero quedar a las puertas del Shambhala, después de cruzar todas las montañas sagradas.

ATENCIÓN: Este artículo no es apto para fanáticos Su lectura puede causar incendios de embajadas y hacer llorar sangre a las estatuas de la virgen.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Menos mal que EL es magnanimo, que si no la herejia de las albondigas de soja te iba a costar una inquisicion jeje